Un jubilado de 67 se encontraba tranquilamente en su casa, cuando recibe un llamado telefónico a su linea fija por parte de una persona que le refirió que aparentemente tenían a su hijo secuestrado , solicitándole dinero a los fines de no quitarle la vida al mismo, el hombre en shock pide hablar con su hijo y allí es cuando lo hacen hablar con un masculino que para el era su hijo, diciéndole que entregara todo el dinero que tenia. Después de un rato de esta desesperante situación, le solicitan su número de teléfono celular y el de su esposa.
Pasados unos minutos, cortan con la comunicación inicial al teléfono fijo e inmediatamente comienzan a llamar a la pareja de jubilados a sus respectivos celulares desde un número desconocido, amenazándolos con que iban a ir a su domicilio e ingresar para que les dieran el dinero, manifestando que debían dejarle la suma de 100.000 pesos y de 4950 dólares en el centro de la cinta asfáltica frente a su vivienda, cuando el hombre lo hace, logra observar al salir que en la esquina de su casa había dos masculinos que no llego a reconocer y sospecha que allí fue que retiraron el dinero. Las grabaciones de sus cámaras de seguridad son la única prueba que fue entregada a la Dra. Susana Gandolfo, Secretaria de la UFI y J. N° 2 Colon ya que no hay testigos del hecho ni sospechas acerca de quienes podría haberse tratado.