Es común que haya problemas de bullying o convivencia escolar entre adolescentes, pero en este caso toda la situación se salió de control, cuando una joven de quince años habría sido agredida físicamente por su compañera de clase de tan solo 16 años a la salida del colegio, tras varias amenazas. El conflicto vendría de larga data.
La madre de la víctima fue quien realizo la correspondiente denuncia policial, cuando su hija menor de edad llego lastimada a su casa, tras haber sido amenazada de manera verbal previamente, ya que esta compañera de escuela habría mencionado en varias oportunidades que la agrediría, por un conflicto que padres y docentes desconocen.
La progenitora de la joven, solicitó una acción de cese de hostigamiento sin necesidad de recurrir instar a la acción penal.
El motivo que acrecienta la posibilidad de denunciar esta situación de violencia es que al ocurrir en la vía publica en las inmediaciones de la salida del colegio, hubo testigos del hecho.
Como se trata en este caso de menores de edad, interviene la UFI y J. Resp. Juvenil Penal N° 2 de la vecina localidad de Pergamino.